lunes, 30 de septiembre de 2013

¿Servicios o retretes públicos?

No. Tranquilos. No pienso entrar en temas escatológicos. Nada más lejos de mi intención. El nombre del artículo es debido a la intención de ADIF, responsable de las infraestructuras de RENFE, de privatizar los aseos de la estación de Atocha. Aseguran que de esta forma se puede prestar un mejor servicio al ciudadano. Nos aseguran que habrá más limpieza y seguramente evitemos a los desagradables mirones. El único punto negativo es que a partir de ahora nos tocará rascarnos el bolsillo si queremos evacuar.
He hablado con muchos amigos y familiares al respecto y casi todos coinciden en un aspecto. La inmensa mayoría pagaría por usar los retretes públicos, siempre y cuando estén en perfectas condiciones de uso, es decir, limpios. Lo cual nos lleva a dos conclusiones evidentes. Somos un país de marranos, y los responsables del mantenimiento de estos aseos deberían esmerarse más en su higiene. Es evidente que si alguien se encuentra un baño limpio lo dejará limpio, mas si lo encuentra sucio, no se molestará en su cuidado. Por tanto, los mayores responsables son los encargados de esos baños.
Pero la razón más importante y que a mí más te aterra es la costumbre de privatizar bienes públicos a costa del bolsillo del consumidor. El ansia devoradora de nuestros gerifaltes no tiene fin. Su argumento es siempre el mismo, y cansa, por repetitivo y por capcioso: En Europa es una práctica muy común. Soy consciente de que el mantenimiento de los baños implica un coste y que nada es gratis, ni siquiera Whatsapp, pero no se puede pedir austeridad siempre al ciudadano mientras los responsables políticos siguen despilfarrando el dinero de todos. ¿Se imaginan que un ayuntamiento le cobre por respirar puesto que está consumiendo el tan vital oxígeno? ¿O una tasa de aceras por desgastarlas mientras camina? No se escandalice, estoy convencido de que llegará más pronto que tarde. Estamos cediendo todos nuestros derechos y aunque pataleemos no hay una respuesta contundente del pueblo. 

Piensen.
Sean buenos.

La canción regalo de hoy es "Discothèque" del disco Pop, de 1997. Disfruten. Es U2.




lunes, 23 de septiembre de 2013

Autoridad en la educación

Aunque parezca una representación teatral jardielista, les aseguro que es un caso real.

La acción trascurre en un colegio, durante la realización de un examen final de septiembre. La maestra se percata de que el alumno Florencio Baselgo —nombre ficticio tomado precisamente de la obra "Madre, el drama padre" de Jardiel Poncela— no ha acudido al examen. Evidentemente, su nota es "No presentado". La obra terminaría aquí si el susodicho no hubiera jurado y perjurado en casa que él realmente sí hizo el examen. Sus padres, acuden al colegio solicitando explicaciones y la maestra les explica la situación, pero ellos no la creen y deciden poner una reclamación en la correspondiente Consejería de Educación. Cuando llega la inspección, el colegio no puede demostrar que Florencio no se presentó al examen, a pesar de contar con el testimonio de la maestra y de algunos alumnos. Aseguran desde la Consejería que no hay pruebas evidentes que determinen que nuestro respetado alumno no hizo el examen por lo que tienen la obligación de repetirle el examen.

¿Qué sociedad, o debería decir parafraseando a la genial Mafalda, qué zoociedad hemos creado en la que la palabra de un alumno tiene el mismo peso jurídico que la de un maestro? Una cosa es consentir que los maestros golpeen y maltraten a los alumnos como hacían años ha —seguramente cuando sus padres o abuelos acudían a la escuela— y otra bien distinta equiparar al alumno y al maestro. Pensaba que el trabajo del maestro es educar, y para educar tiene que haber un mínimo de AUTORIDAD. Reconocer que el maestro sabe y el alumno aprende. Parece sencillo ¿verdad? Pues no lo es.

Muchas gracias responsables de la Educación. Muchas gracias por destruir el sistema educativo. No han dejado piedra sobre piedra. ¿Cuál será el siguiente desvarío? ¿Será el alumno quien se corrija sus propios exámenes para evitar traumatizarlo con suspensos? Ya están cerca de conseguir sus propósitos. La sociedad que han creado es analfabeta. Ya somos manejables. Ya pueden hacer con el país lo que se les antoje. Ahora ya sabemos que para triunfar en la vida no hay que esforzarse, sino tener el carné del partido gobernante y el resto vendrá solo.

Piensen.
Sean buenos.

La canción regalo de hoy es "Sunday Bloody Sunday". No sé si queda algo por decir de una de las mejores canciones de la historia de la música. Es sencillamente brutal. Todo: Música, letra, melodía... Disfruten. Es U2.



lunes, 16 de septiembre de 2013

Ofertas de empleo

La semana pasada, un conocido portal de internet de búsqueda de empleo publicó una oferta de repartidor de bollos, en la que se exigían recién licenciados en Administración y Dirección de Empresas y en posesión del carné de conducir con una antigüedad de dos años. El sueldo oscilaba entre los 12 000 y 15 000 euros brutos al año y la jornada laboral comenzaba a las 4 de la mañana para poder entregar los bollos. Tras la sorpresa popular —que acabó por volverse irritación— ante semejante anuncio, la empresa finalmente decidió retirar ese requerimiento. Lo justificaba por la posibilidad de promoción. Cabe destacar que antes de retirarlo se habían inscrito en la oferta más de 600 solicitantes...

Otro claro ejemplo es el vivido por mi amiga Dulcinea del Toboso —nombre ficticio— que trabajaba en una ONG de renombre internacional. Estaba supliendo una baja por enfermedad, y cuando llegó el mes de agosto, dicha ONG decidió despedirla para ahorrarse así su sueldo durante las vacaciones, con la promesa de contratarla de nuevo en septiembre. Pero no fue así, llegada la fecha, le propusieron incorporarse de manera voluntaria a su puesto, a lo que ella tuvo que negarse y aceptar el trabajo de saladora de puercos, donde según se dice tuvo la mejor mano en toda la Mancha (Don Quijote, Primera parte, capítulo IX). La pobre Dulcinea tenía que hacer frente a la hipoteca y a que sus hijos tenían la desagradable costumbre de comer todos los días... ¡e incluso tres veces! Hay gente que malcría a sus hijos de forma descarada.

Son solo unas muestras de la situación del mercado laboral. Las podríamos contar por miríadas. Ante la carestía de empleos, la gente ha de aceptar cualquier trabajo. Esto es perfectamente comprensible. Todos tenemos muchos gastos. Lo que no es admisible bajo ningún concepto es que los empresarios quieran confundir trabajadores con materia prima que puede utilizarse hasta agotarla, hasta exprimirla. Es decir, quieren esclavos. El día que descubran que el trabajador es el mayor activo de la empresa quizá la cosa cambie. No se puede despreciar a la gente. Es muy respetable el trabajo de repartidor de bollos, pero quizá no sea necesario tener una licenciatura para ejercerlo perfectamente. Que luego no se quejen nuestros políticos por la fuga de cerebros, aunque haya quien no lo vea negativo o lo llame "movilidad exterior".


Piensen.
Sean buenos.

La canción regalo de hoy es "When love comes to town". Un blues como no podía ser menos. Hay pocas veces en las que alguien supere a Bono y The Edge cantando y tocando la guitarra. En esta ocasión, un recién llegado a esto de la música lo consigue. Les pega una paliza antológica. Su nombre... B.B. King. Un auténtico monstruo del blues. Merece la pena escucharla. Disfruten. Es U2.





lunes, 9 de septiembre de 2013

Fin del sueño

Se acabó el sueño. A pesar de las halagüeñas perspectivas que nos presentaba la candidatura, —y coreada por los medios, puesto que parecía que la elección era un mero trámite porque ya habíamos ganado la votación— finalmente Madrid no albergará los Juegos Olímpicos de 2020 (me gustaría conocer quién ha sido la mente privilegiada que ha inventado el veinte veinte. Valiente mamarrachada). La capital española fue eliminada en la primera votación tras empatar con Estambul y perder en el desempate. El Comité Olímpico Internacional (COI) eligió a Tokio como sede de los JJ.OO.

Como es lógico tras un hecho tan importante, la opinión pública ha mostrado su alegría o decepción tras la no designación de Madrid como sede olímpica. Los que se alegran de la no elección de Madrid como sede olímpica arguyen que la celebración de unos Juegos Olímpicos es un despilfarro incontrolado; mientras que los decepcionados opinan que la concesión de los Juegos en Madrid hubiera supuesto un beneficio económico —y por ende social— muy importante, tanto a la propia ciudad, como al resto del país, puesto que la mayoría de las instalaciones ya están construidas y listas para su uso.

No creo que haya ningún japonés maldiciendo su suerte por haber ganado la votación y ser sede olímpica. Quizá en eso sí que nos ganen. Presentan una candidatura contando con el apoyo popular. No se puede competir por unos Juegos Olímpicos con medio país enfrentado contra el otro medio. Nadie se ha creído las optimistas ¿y veraces? encuestas del Comité Organizador. Es posible que en España seamos unos tremendistas y siempre vayamos al límite de los acontecimientos. Ni sería un fracaso ni un éxito. Es posible que la realidad esté entre estos dos términos. Lo que es evidente es que todos estaríamos de acuerdo en celebrar los Juegos Olímpicos en Madrid si nos aseguran dos cosas: 
  1. Que a pesar de la millonaria inversión necesaria, el resultado iba a ser positivo. Ésta quizá sea la clave de la operación, puesto que un gran beneficio precisa una gran inversión y la situación en España está para pocas alegrías.
  2. Y que los beneficiados no iban a ser los políticos, los banqueros y los constructores, sino la sociedad en general.
Si se cumplen estas premisas estoy convencido de que la sociedad apoyaría la candidatura sin fisuras. ¿O no?

Piensen.
Sean buenos.

La canción regalo de hoy es "Two hearts beat as one", canción casi escondida en su disco War (1983). Dos corazones que pueden latir al unísono si la causa es común. Disfruten. Es U2.





lunes, 2 de septiembre de 2013

Fracking

Es posible que muchos de ustedes desconozcan qué significa este término anglosajón. Reconozco que yo mismo no lo había oído hasta hace bien poco, durante mis recientes vacaciones por mi querida Santander. Se utiliza esta palabra para referirse a la Fractura Hidráulica, es decir, a extraer gas o petróleo fracturando la roca —generalmente esquistos y pizarras—. El proceso es relativamente sencillo, se realiza una perforación y se introduce a presión agua con arena y diversos elementos químicos. De esta manera se extrae el gas atrapado en la roca.

Es una técnica muy empleada en Estados Unidos, donde se emplea desde 1860, aunque no se explotó de manera industrial hasta 1949. No pierdan de vista que, desde entonces, en Estados Unidos el precio del gas natural ha descendido un 44%, mientras que en Europa ha aumentado un 23%. Es pues, una forma barata de extraer combustibles fósiles. A priori parece una opción idónea, pero no. No lo es. Las repercusiones medioambientales son terribles. La más evidente es la contaminación de las aguas subterráneas, aunque también está el elevado consumo de agua y la contaminación atmosférica. Los elementos químicos utilizados son más de 500. Son secretos y se sospechan que pueden ser cancerígenosTambién se relaciona con la provocación de terremotos. Algo como ven muy grave. El Parlamento Europeo ha reconocido ya en un informe que es una técnica muy contaminante. Si está demostrado que es nocivo, ¿qué esperamos para prohibirlo de manera tajante?

Simplificando todo es evidente que el único argumento a favor del fracking es la rentabilidad económica, mientras que en contra está la elevada contaminación. Ante este escenario quedan pues algunas preguntas sin resolver. ¿Van a primar los intereses económicos de las empresas energéticas o nuestra salud? ¿Cree usted que los dirigentes de estas empresas, entre los que incluyo a los ex presidentes González y Aznar —consejero de Gas Natural y asesor de Endesa respectivamente— vivirían en una zona afectada por la Fractura Hidráulica? ¿Sus hijos beberían el agua del grifo que pudiera estar contaminada? Si la respuesta es no solo me queda una explicación: Poderoso caballero es don dinero... ¡Qué pena!

Piensen.
Sean buenos.

La canción regalo de hoy es Springhill mining disaster. Es una versión de la canción compuesta por Peggy Seeger y Ewan McColl tras los diferentes accidentes mineros que ocurrieron en Springhill, Nueva Escocia, Canadá y que la banda irlandesa interpretó para llamar la atención sobre los peligros mineros. Parece que hablan del Fracking. Disfruten. Es U2.









¿Bale lo vale?

Ya es oficial. Tras un verano en el que hemos oído mil veces que el fichaje del jugador del Tottenham, Gareth Bale estaba en su recta final (qué hartazgo de periodistas por cierto), finalmente se ha confirmado. El Real Madrid ha fichado al jugador galés por una cantidad que oscila entre los 91 y 101 millones de euros, según aseguran el Madrid y el Tottenham respectivamente. Esa es la noticia que se habrá encontrado usted en su periódico, en su programa de radio o en su noticiero televisivo. Regocíjese. Hoy no aparece la corrupción, ni el paro, ni guerras, ni ningún desastre en primera plana.

A partir de aquí llega la disyuntiva. ¿Es mucho dinero? La respuesta es dispar. Los aficionados —fundamentalmente merengues— aseguran que es mucho dinero, pero lo justifican aduciendo que es un dinero fácilmente recuperable por la mercadotecnia —marketing les gusta llamarlo a los posmodernos trasnochados— y por los títulos que va a lograr. Eso mismo dijeron de Kaká a quien ahora han regalado al A.C. Milan, ante la imposibilidad de mantenerlo más tiempo en la plantilla y tras demostrar que ha sido una auténtica ruina, tanto deportiva como económicamente. Por el contrario, los aficionados no madridistas —¿o debería decir antimadridistas?— afirman que es un dispendio inmoral. Por ese dinero se podría construir, por ejemplo, un gran hospital... ¿Quién tiene razón?

Como casi siempre en estos casos, todos y ninguno tienen razón. O por lo menos toda la razón. Yo, me reconozco muy futbolero, y fiel seguidor del Racing de Santander —equipo llamado a volver a la elite del fútbol internacional y escribir con letras de oro la historia del fútbol mundial—, pero hay que poner límites inmediatamente. El Madrid como entidad privada puede hacer lo que le venga en gana con su dinero, pero la sociedad no puede permitir que se paguen esas cantidades por un jugador de fútbol. Ya sé que el precio lo pone el mercado y que solo el necio confunde valor y precio, pero consentir estos disparates es una barbaridad intolerable. Con la actual situación social del país, plantar estas operaciones es, sencillamente, vergonzoso. 

Piensen.
Sean buenos.

La canción regalo de hoy es Gone. Trata del sentimiento de culpabilidad por el éxito por ser una estrella del rock. Aplíquenlo al caso que no ocupa. Disfruten. Es U2.