lunes, 23 de abril de 2012

Pedro Duarte

Imagino que todos ustedes están al corriente de los hechos. Por si acaso hubiera algún despistado, trato de resumírselo en breves palabras. Pedro Duarte, responsable de los New Media (así se llama el puesto) del Real Madrid ha sido despedido —cesado dirían los posmodernos— tras haber publicado comentarios violentos y xenófobos en su cuenta de Twitter. Entre otras lindezas publicó que desea que exterminen a todos los sindicalistas; que no cree en huelgas sino en guerras; que va a descubrir nuevas tierras por conquistar refiriéndose al País Vasco; que le agrada que Froilán tenga armas y pretende proveerle de bombas para que destruya la sede de UGT... Tras la polémica, Pedro Duarte pidió perdón públicamente, pero ya fue demasiado tarde. El Real Madrid decidió despedirlo fulminantemente, aunque él asegura que tras las afirmaciones difamatorias decidió dimitir para tomar las acciones legales pertinentes.

¿Debe existir una relación entre vida profesional y vida personal? Hay quien opina que sí. El señor Duarte puede ser un gran profesional, quizá el mejor, y puesto que esas afirmaciones son personales y no afectan para nada a su profesión, debería haber continuado realizando su trabajo. Por otra parte, hay quien opina que existe una relación indisoluble entre vida profesional y personal. Me decía mi amigo Óscar que él puede ser el mejor profesional del mundo de lunes a viernes, pero que si todos los sábados y domingos es visto borracho por la calle y organizando escándalos, su jefe acabaría despidiéndole puesto que estaría dando una pésima imagen de la empresa.

Está claro pues que esa relación entre vida profesional y vida personal existe y es irrompible o muy difícil de romper. Tengan cuidado pues todos ustedes con lo que hacen en sus vidas privadas, con lo que publican en sus perfiles de Facebook o Twitter... porque puede tener consecuencias en su vida profesional. Y si no, que le pregunten a Juan Carlos, nuestro rey, si existe esa relación...

Piensen.
Sean buenos.
P.D. Estoy profundamente abatido por la nueva derrota de mi equipo, el Racing de Santander, que parece abocarle a Segunda División.

4 comentarios:

  1. Evidentemente, la relación existe. Es más, cada vez, los "jefes" están más pendientes de lo que "sus chicos" dicen y comentan en las redes sociales.
    Mi opinión personal (desvinculada totalmente de la empresa para la que trabajo), es que cada uno es como es, y si eres "buena gente" no creo que nadie te despida por tener "diferente ideología política, deportiva o religiosa" a la de la empresa para la que trabajas; pero eso sí, si eres un "cafre" es normal que te echen del trabajo, de tu barrio y de tu propia ciudad.

    ResponderEliminar
  2. Pues si eres un mindundi del departamento de marrones y cobras 500 euros al mes, a tu jefe y a tu empresa le va a importar un comino tu vida personal mientras rindas en el trabajo y no afectes de forma directa a la empresa en tus actos u opiniones.

    Si tu puesto de trabajo forma parte de la imagen publica de la empresa entonces pasas a ser un personaje mas o menos publico y eso hace normal que si deterioras tu imagen deteriores la de tu empresa y claro lo logico es que te echen.

    Quizas el error es pensar que una red social es un entorno privado, y que lo que se pone alli no transciende, no lo es y sino mejor que leamos todos las condiciones de uso de facebook o twitter.

    Hace muchos años echaron a un becario de la empresa donde yo trabajo porque en un blog como este llamo "cretino integral" al director de RRHH de la empresa con nombres y apellidos.Pensó que era anonimo, lo que no pensó es que es blog era leido por mas personas, algunos cercanos al director en cuestion y tampoco pensó que las condiciones de anonimato con las que abrimos una cuenta de google (por ejemplo) no son lo que de primeras podemos pensar. Al dia siguiente estaba en la calle...

    Espero que el racing baje a 3º regional que eres muuuu cansiiiiino!! madridista....

    ResponderEliminar
  3. Para mí hay partes de la vida privada que perjudican claramente una imagen y eso implica una responsabilidad. El señor Duarte no dijo que no le gustasen los sindicalistas sino que fue más allá, y eso implica una responsabilidad.

    ResponderEliminar
  4. Por esto mismo, también la vida privada impecable de Diego Gafo debería acarrear como consecuencia una buena oferta de trabajo en una estupenda empresa.

    ResponderEliminar