El presidente de Irán Hasán Rohaní está de visita por Europa tras el fin del programa nuclear y la suspensión de las sanciones. Su primera parada fue Roma, y el gobierno italiano decidió cubrir determinadas esculturas en las que aparecían desnudos como forma de respeto a la cultura y sensibilidad iraní. También se cambió la escenografía del Museo Capitolino, donde aparecieron los dos mandatarios, ya que a la delegación iraní le incomodaba la estatua ecuestre de Marco Aurelio. A decir verdad, ignoro qué le puede ofender de la estatua en cuestión... Como ven el ridículo italiano ha sido mayúsculo.
La segunda parada del mandatario persa ha sido París. En esta ocasión, aparte de las protestas del Consejo Nacional de la Resistencia Iraní y de Femen, simulando un ahorcamiento semidesnudas cerca de la Torre Eiffel, el gobierno galo se mantuvo firme y se negó a aceptar las exigencias iraníes. Entre ellas querían que se eliminara el vino de las comidas. El gobierno de Hollande no quiso incumplir su tradición, y en un acto que le honra, canceló la comida. Estoy convencido de que si algún mandatario europeo va a Irán, cubren con sábanas el incumplimiento sistemático de Derechos Humanos, como la flagelación de homosexuales; lapidaciones de mujeres, persecución de cristianos; judíos o sunníes... Parece ser que a los dirigentes iraníes estos detallitos les parecen pecatta minuta comparado con una escultura del maestro Miguel Ángel.
Pero no se hagan ilusiones, no crean que suspendieron las negociaciones —la verdadera razón del viaje de Rohaní—. Poderoso caballero es don dinero. Y lo peor es que el rimbombante occidente sigue plegándose ante los petrodólares. Parece que, desgraciadamente, todavía no queremos emplear otras tecnologías, más respetuosas con el medio ambiente. De esta forma ganaríamos todos. Hay una cosa que nuestros dirigentes han olvidado, y se llama DIGNIDAD. Quizá haya llegado el momento de plantarse y dejar de comprar el petróleo a estos regímenes, aunque sea más caro. Ya está bien de aguantar las mamarrachadas de esta gentuza. Hay quien exige respeto. Estoy convencido de que todos nosotros respetamos mucho al señor Rohaní y a su corte, pero no creo que nadie en su sano juicio respete, ni por un instante, sus insensateces. Esta es la clave. Lamento informarles de que todos somos cómplices de las atrocidades que perpetran estos descerebrados mientras sigamos siendo esclavos de su petróleo.
Piensen.
Sean buenos.
La canción regalo de hoy es Surf Talibán. Vamos a poner una nota de humor al tema. Una canción que a buen seguro hará las delicias de Carni. Con todos ustedes: ¡Doctor Explosión!
https://www.youtube.com/watch?v=PoQd8RTu9LY
Piensen.
Sean buenos.
La canción regalo de hoy es Surf Talibán. Vamos a poner una nota de humor al tema. Una canción que a buen seguro hará las delicias de Carni. Con todos ustedes: ¡Doctor Explosión!
https://www.youtube.com/watch?v=PoQd8RTu9LY
La dignidad no mueve coches y da más bien poco de comer... hay muchas maneras de plegarse ante muchas cosas. Al menos, Italia estará unos pasos por delante.
ResponderEliminarHola Diego no he podido leer hasta hoy tu artículo he tenido una semana liada .Una vez más estoy de acuerdo contigo y me quito el sombrero por lo que han echo los franceses estan en su casa y no tienen porque romper sus costumbres ante un país de costumbres inhumanas y tremendamente arcaicas , no todo vale .
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