Huelga y Plenos

En Toledo, donde vivo, se realizan los plenos de las Cortes de Castilla-La Mancha todos los jueves. Y aquí comienza el problema. Ese día coincide con la convocatoria de huelga general y evidentemente hay muchos intereses que chocan. Por un lado, el secretario general de CC.OO. Ignacio Fernández Toxo asegura que ese día prima el derecho legítimo de huelga, mientras que desde el Gobierno de Castilla-La Mancha se asegura que las fechas de las sesiones son los jueves. Interesante situación. ¿Qué se debe hacer?

La oposición, opina que la solución es sencilla. Basta con modificar el día del pleno. En vez de realizarlo este jueves, se puede celebrar cualquier otro día para que no coincida con la convocatoria de huelga general y asunto resuelto. No es tan sencillo. El gobierno prefiere mantener la fecha puesto que son los jueves cuando se celebran estos plenos. A esto hay que añadir un nuevo problema, y es que hay políticos que desean secundar la huelga pero consideran que sus obligaciones con los ciudadanos les exige ir a este pleno.

Creo que se debería mantener la fecha del Pleno y que cada político decida si secunda la huelga o no. Evidentemente, si se hace huelga, se le descontará ese día de trabajo como a cualquiera de nosotros. Eso es una huelga. No me valen las medias tintas. Si el médico tiene una operación programada ese día se le planteará la misma disyuntiva (para los de la LOGSE les explico que disyuntiva significa alternativa entre dos cosas, por una de las cuales hay que optar). Debe elegir por tanto. O no hace huelga o perjudica seriamente a su paciente. Que sea él quien decida. Lo mismo ocurre con el resto de profesiones, el maestro, el albañil, el abogado, el trabajador social... Son ellos quienes deciden. ¿Por qué hay que facilitárselo a los políticos? Ya dije en mi anterior entrada sobre la huelga que no era el momento, pero en fin, que cada palo aguante su vela.

Piensen.

Sean buenos.