Hace cien años, Einstein propuso la Teoría de la Relatividad General, que junto con la Mecánica Cuántica pueden explicar con increíble precisión, TODOS los fenómenos físicos que ocurrieron, ocurren, y ocurrirán en el Universo. Desde entonces, miles de experimentos en todo el mundo han estado confirmando la veracidad de la Teoría de la Relatividad. Uno de los fenómenos que predecía son las hoy tan famosas ondas gravitacionales. Pero ¿qué son en realidad? Según la Relatividad General, el espacio y el tiempo no son absolutos, sino que pueden “deformarse”, expandirse o contraerse, y ser diferentes para observadores distintos. Por ejemplo, cerca de un objeto de gran masa, como una estrella, el tiempo pasa más despacio y el espacio parece alargarse. Si alguien estuviera cerca de una gran masa, nosotros desde lejos lo veríamos a cámara lenta y el a nosotros como a cámara rápida. Con el espacio pasaría algo similar, nos vería más pequeños y nosotros a él lo veríamos más grande. Es decir, el espacio-tiempo en ciertas situaciones, no es igual para cada observador.
Por este efecto, si una gran masa orbita en torno a otra, como dos estrellas o dos agujeros negros orbitando entre si, el espacio-tiempo debería contraerse y expandirse de forma cíclica, y estas deformaciones del espacio-tiempo generadas se deberían ir propagando de forma similar a las ondas, que los físicos han llamado ondas gravitacionales. Las variaciones del espacio-tiempo se han medido muchas veces de forma indirecta, y coinciden con lo que la teoría predecía, pero nunca hasta hoy, se habían medido directamente las variaciones del propio espacio-tiempo fluctuando como ondas.
El experimento LIGO en Estados Unidos ha sido capaz de detectar estas ondas gravitacionales: variaciones en la deformación del espacio-tiempo. Para ello, se han colocado dos parejas de rayos láser colocados a 3000 Km una de otra, apuntando a dos agujeros negros conocidos que orbitaban entre sí. De esta forma, al llegar las ondas gravitacionales al haz de láser, el espacio se debería contraer y expandir de forma ciclica, y en teoría, sería posible medir estas deformaciones del espacio-tiempo. Pues bien, parece ser que en la etapa de pruebas del LIGO, han observado con bastante claridad lo que se buscaba: el espacio se contraía y expandía en longitud en una parte de cada 1000000000000000000000 metros. Es decir, ¡¡la cuarta parte del tamaño de un protón!!
Alucinante. Particularmente, creo que deberían dar el Nobel a los ingenieros, más que a los físicos. ¿Y por qué esto es importante? En primer lugar, confirma la Teoría de la Relatividad General, que utilizamos en infinidad de tecnología. En segundo lugar, podremos estudiar el Universo no solo con la luz que nos llega como hasta ahora, sino también con otros ojos, estudiando las ondas gravitacionales, y en tercer lugar, para satisfacer el increíble deseo del alma trascendente humana de reconocer la verdad en la belleza de la realidad.
¡Gracias don Pablo por el aporte!
¡Gracias don Pablo por el aporte!
Piensen.
Sean buenos.
La canción de hoy no puede ser otra The scientist. Divertido vídeo en el que el cantante canta la canción a cámara inversa. Ya saben, el espacio y el tiempo no son absolutos. Solo estaba suponiendo números y cifras, desmontando los rompecabezas. Las preguntas de ciencia y de progreso no hablan tan alto como mi corazón. Con todos ustedes: ¡Coldplay!
Felicitaciones Diego
ResponderEliminarNos traes al análisis un tema complejo, en términos simples!!
No pares de escribir!!! Haces bien
Difícil decir no me gusta a una explicación tan clara de una materia compleja Gracias Diego por ello hoy he aprendido una cosa más
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